15 abril, 2012

Cinco mitos acerca del voto nulo


Hemos vuelto al blog, después de abandonarlo descaradamente y encontrarlo como un lote baldío lleno de vagabundos y parias. No estábamos de vacaciones, sino todo lo contrario, ustedes saben, hay que perseguir la chuleta todos los días haciendo trabajos que no nos satisfacen tanto como escribir; pero al fin y al cabo, ya estamos en el campo de entrenamiento, que es como yo veo a este su H. H. blog. Retomemos pues, la columna terrorista.
En esta época en que de pronto los políticos por la magia de la televisión y el marketing se convierten en gente honesta y ejemplar, cuando nos han estado jodiendo desde el gobierno, a veces más de un sexenio; toda la clientela…, digo, los ciudadanos se preguntan qué van a hacer con su voto. En un país tragicómico (diría José Agustín), como es el nuestro, parece que los partidos no están buscando convencer a nadie (no porque no quieran, sino porque no tienen nada qué ofrecer), sino que los premien por la mejor campaña de propaganda basura.
Ante esta crisis de representatividad, aparece otra vez el fantasma del voto nulo, que es visto como amenaza, tanto por sectores de la izquierda como por grupos de derecha (los menos). ¿Por qué esta simple manifestación de inconformidad provoca tanta virulencia, sobre todo en las redes sociales? A continuación, una teoría.

Mito 1: El voto nulo no sirve de nada
Como si votar sirviera de algo, si no es para que los políticos de cualquier color se despachen con la cuchara del pozole a la hora de repartir el presupuesto. Voto nulo es igual a nada y hacer nada es ayudar a la derecha para que triunfe. Este silogismo que esgrimen, sobre todo, los chicos refor democráticos y políticamente correctos, no toma en cuenta a aquellas organizaciones que han decidido promover el voto nulo, pero que ya tienen un plan de acción al respecto. Organizaciones como el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, tienen su propia agenda y muchas de ellas llevan años defendiendo los derechos humanos y viendo como, reiteradamente, los gobiernos del PRI, PAN, PRD, Verdes, Panales, todos; son omisos y se hacen de la vista gorda ante desapariciones forzadas, tortura y otros crímenes de Estado, ¿es justo tacharlos de traidores porque promueven el voto nulo?, esas opiniones son tan infantiles como esos sectores, según ellos radicales, que promueven el voto nulo, pero que no tienen ningún plan de acción ni agenda pública, y sólo lo hacen porque, desde su perspectiva, están destruyendo al sistema.

Mito 2: El voto nulo beneficia a la derecha
Este punto va muy de la mano con el siguiente, y es que según los resultados de las elecciones pasadas, el voto nulo sólo representa una ínfima parte del total del padrón electoral (entre 3 y 4%), y la derecha, por lo menos en los últimos 3 años, siempre ha ganado de calle. Sin ir más lejos, en el Estado de México ganó con 39.29%, el voto nulo no hubiera influido en este resultado porque el PRD obtuvo el 15.78% del total de la votación; esos 3 ó 4 puntos de voto nulo (y eso, suponiendo que todos los anulistas son de izquierda, lo cual también es un mito), no los hubieran llevado a la gubernatura. El caso de la elección del 2006, se cuece aparte, porque el voto nulo no puede frenar un fraude electoral tan cocinado como el que se llevó a cabo ese año, con lo cual, devuelvo su pregunta a los demócratas de la izquierda electoral: ¿sirve de algo votar?

Mito 3: Sólo la izquierda anula su voto
Nada más falso, ¿por qué?, porque no sólo amplios sectores de la izquierda están hartos de la partidocracia, sino también un sector de los votantes tradicionales y de los indecisos. De esto se puede dar uno cuenta tan sólo platicando con las personas o interactuando un poco en las redes sociales. He conversado con gente que no votaría por Obrador, aunque los otros candidatos fueran los zombis de Victoriano Huerta y Porfirio Díaz. El electorado es más complejo, precisamente porque los seres humanos estamos hechos de matices, no de blancos y negros. Incluso he convencido a votantes del PAN y del PRI de anular su voto, lo cual no perjudica a la izquierda, y si tomamos en cuenta el mito anterior, tampoco la beneficia.

Mito 4: Los anulistas son tontos inútiles
Satanizar e insultar a los partidarios del voto nulo, no va hacer que ellos cambien de opinión, sino más bien va a refrendar su convicción de que los partidos no tienen argumentos para que voten por ellos. El voto nulo también es reflejo de la crisis de representatividad, credibilidad y gobernabilidad que contagia a todo el espectro político, y eso tiene que ver más con cómo han venido gobernando esa partidocracia enquistada en el presupuesto y con cómo ha dinamitado la viabilidad del Estado-nación y lo ha convertido en su negocio particular.

Mito 5: Votar es la única manera de cambiar las cosas
Eso es, precisamente, lo que nos quieren hacer creer: que no es posible hacer otra cosa más que votar y aceptar silenciosamente el resultado, los medios de comunicación, sobre todo, han introyectado en la gente la idea de que no es posible hacer nada más y que, pasadas las elecciones, todo mundo debe arremangarse la camisa, sacudirse las manos y trabajar para que el país salga adelante; no hay nada más qué decir ni nada más qué hacer. Como hemos podido constatar, los grandes cambios no se han dado gracias al Estado, sino a pesar de él. La revuelta en Egipto que sepultó el régimen de Mubarak no se logró votando, sino saliendo a las calles. Hasta que los ciudadanos no entiendan que ese es el verdadero motor de cambio, nos seguiremos equivocando en cada elección; y en cada elección, los políticos se seguirán riendo de nosotros en nuestra cara.

Posdata
Las encuestas se han convertido en un factor perverso de la elección, sobre todo porque tienen una doble función: desmoralizar al contrincante y generar la percepción de que hay una tendencia irreversible y aunque vayas a votar, no podrás cambiarla. Hay algo que pueden hacer los otros dos contrincantes para romper con esa lógica: que el PRD y el PAN le digan a sus votantes que se declaren indecisos cuando los encuesten. De esta manera, sólo quedarán tres columnas: Peña Nieto, Indecisos y Quadri, y como podrá verse, en esta nueva gráfica ganarán los indecisos de calle. Eso, si en verdad les preocupa lo que digan las encuestas que compró Peña Nieto, como GEA-ISA y Consulta Mitofsky.

2 comentarios:

  1. sabias que mas del 40% esta a favor del voto nulo por eso tienen miedo http://www.noroeste.com.mx/publicaciones.php?id=771110

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  2. No tenía ese dato, pero si es así, el voto nulo se debe traducir en acciones concretas, de lo contrario, le daremos la razón a quienes piensan que no sirve para nada.

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Pipicacamoco.